La administradora de una cafetería en Villa Clara, Cuba, se quiso hacer “la bicha” e intentó “barajar por la izquierda” unas tanquetas de yogurt, con tan mala suerte que un equipo de periodistas del diario Vanguardia se encontraba cerca del lugar y acudió, presto, ante el llamado de algunas de las personas que se encontraban en la cola. Para colmo de su mala suerte, con los periodistas se hallaba, de recorrido, un alto cargo del Ministerio del Interior en la provincia.
Todo terminó con una ridícula multa de 100 pesos moneda nacional, es decir, 4 CUC que es más o menos el valor aproximado de una de las tanquetas que esta administradora intentó “esconder” casi que a la vista de todos.
Al ser cuestionada por su proceder, la mujer dijo que las había apartado para sus trabajadoras, pero según el periodista Francisnet Díaz Rondón, había unas tanquetas cuyo destino esta administradora no supo explicar.
Bajo el título de “Yogurt a la sombra“, el diario Vanguardia señala que los hechos tuvieron lugar en la cafetería El Rápido «8 de Marzo», de la empresa Cimex, en Santa Clara, y que gracias al reclamo de los clientes de la cola, varias personas se beneficiaron con el yogurt.
Según explica el medio, ayer lunes 20 de abril se despacharon en horas de la mañana en la unidad 88 tanquetas de yogurt. Todo el mundo vio cuando las bajaban.Sin embargo, luego de comenzado el despacho, una de las dependientas anunció que solo quedaban diez cubetas, y fue ahí cuando se formó el “escándalo”.
Algo no les pareció bien. No había pasado mucho tiempo como para que se acabara tan pronto el lote de 88 en total que había entrado en la mañana del lunes 20 de abril, y exigieron explicación.
Dice el Vanguardia:
“Casualmente, en el lugar (ubicado cerca del hospital Materno) se encontraba un equipo de periodistas de la radio, la prensa escrita y la televisión, de recorrido por el reparto Escambray, reportando sobre las indisciplinas sociales vinculadas a las medidas tomadas en la lucha contra la COVID-19. Les acompañaban el capitán Faustino Rodríguez Mestre, jefe del Ministerio del Interior en el Consejo de Defensa de esa área, y las inspectoras Liuba Herrera Cruz y Yakelín Medina Conyedo, de la Dirección Integral de Supervisión (DIS).”
Un primer vistazo al interior de la cafetería reveló que no quedaban diez cubetas de yogurt, sino 30 por vender a la población, pero ya la administradora, Miriam Pérez Morelle, le había dado de baja, en el inventario, a cinco de ellas que fueron pagadas por las trabajadoras,
“Pero del resto no había justificación clara,” explica el diario, y a continuación reproduce las palabras de la administradora que alegó que “les hizo falta comprarlos a trabajadoras con niños pequeños, pues hacía tiempo no entraba el yogurt.”
Fue el capitán Faustino Rodríguez Mestre quien dio parte de la situación a María Eugenia Veitía Fernández, gerente general de la entidad y Yasmany Jorrín Santos, gerente del Complejo Santa Clara de Cimex.
Veitía Fernández dijo que “los trabajadores de la empresa y cada colectivo saben cómo comportarse en el centro laboral,” y calificó de “lamentable” lo sucedido.
“Por tal motivo, la administradora y la jefa de turno fueron multadas con 100 pesos moneda nacional, de acuerdo al Decreto 155-2-R, en el apartado Contravenciones de las regulaciones sobre Comercio Minorista, Gastronomía, y determinados servicios a la población, el cual penaliza a quien «favorezca o permita que se favorezcan, en relación con la adquisición de productos o disfrute de servicios, a determinados consumidores o usuarios, o a trabajadores de la propia unidad en que se venden o presten dichos productos o servicios […]»” resume el Vanguardia.
