“No podemos permitir que los que deben protegernos y servir [a la sociedad] hagan esto”, dijo el abogado de la familia de George Floyd.
Numerosas manifestaciones están teniendo lugar en EE.UU. tras la muerte de un afroestadounidense, George Floyd, en lo que constituye un nuevo caso de violencia policial y racismo, que de haber tenido lugar en Nueva York hasta pudiera calificar como “delito de odio”, según una nueva legislación que existe para casos similares en la Gran Manzana.
Las protestas, numerosas, pudieran incluso ir sumando presión tras la publicación de un video tomado de una cámara de seguridad de un restaurante cercano al lugar donde ocurrieron los hechos, y que muestran a un George Floyd cooperativo y esposado.
¿Qué sucedió después? Eso es lo que todos quieren saber, y solo la revelación de los videos de las cámaras corporales de los agentes pudiera dar la última palabra en lo que ya muchos catalogan como un asesinato.
Un policía arrodillado en el cuello de una persona esposada y sostenida por otros tres agentes da pie a tales palabras: abuso policial, asesinato, muerte, racismo, represión.
La indignación comenzó con la publicación de un video en el cual se ve a un policía blanco arrodillado sobre el cuello de Floyd durante varios minutos. En la filmación se escucha a George Floyd, la víctima de 46 años, pidiendo ayuda, mientras grita en repetidas ocasiones: “No puedo respirar”.
El agente nunca liberó la presión de su rodilla sobre el cuello de Floyd.
Posteriormente, el hombre, inmóvil, es puesto en una camilla y trasladado en una ambulancia. Más tarde fue declarado muerto.
Como consecuencia del incidente, los cuatro funcionarios del Departamento de Policía de Minneapolis (MPD) involucrados en el suceso fueron despedidos, y ahora el FBI se sumó a la investigación, mientras la familia de George Floyd pide que se les acuse de homicidio a los agentes involucrados, y señalan que despedirlos no es suficiente.
“Es exactamente lo que hicieron. Mi hermano estaba pidiendo ayuda a gritos. No necesito que sean suspendidos y puedan trabajar en otro estado, en otro condado (…) Deberían meterles en prisión”, manifestó la hermana de Floyd Bridget en la cadena NBC.
Varios testigos presentes le indicaron al policía que George Floyd parecía estar sufriendo de verdad la falta de aire, y le pidieron al agente que quitara la rodilla de su cuello, incluso al notarlo que ya estaba inmóvil.
Estas y palabras como “le está sangrando la nariz”, se escuchan en el video, mientras otro le suplica al policía: “Quítese de su cuello”.
“No podemos permitir que los que deben protegernos y servir [a la sociedad] hagan esto”, dijo por su parte el abogado de la familia Floyd, Ben Crump.
“Traten de pensar […] una rodilla sobre su cuello, sofocándoles, y ustedes suplicando por respirar. Eso es por lo que [este caso] tiene que ser un punto de inflexión para garantizar una justicia igual para todos”, remarcó el abogado de la familia a la cadena NBC.
A pesar de la pandemia del coronavirus, cientos de manifestantes acudieron de forma pacífica y manteniendo la distancia requerida al lugar donde se produjo el incidente.
“Armados” con pancartas donde podía leerse frases como “No puedo respirar” y “Podría haber sido yo” y “Black Lives Matter”, luego, el grupo se movilizó hacia el distrito donde se cree que trabajaban los agentes involucrados. Ya ahí las cosas se descontrolaron un poco. Y han seguido descontrolándose.
Everyone is hurting. Anyone with an ounce of humanity is outraged by George Floyd’s killing in the hands of police. The case cries out for action, charges & justice.
But we can’t hurt each other. As a new day dawns pls listen to the Mayor re your safetyhttps://t.co/PeWfSlEChz
— Amy Klobuchar (@amyklobuchar) May 28, 2020
Varios manifestantes apedrearon la comisaría de policía y pintorretearon los autos de patrulla. Los agentes, en respuesta, lanzaron gas lacrimógeno y granadas aturdidoras.
Un manifestante dijo: “La policía tiene que entender que este es el clima que han creado”.
Mientras, en una conferencia de prensa, el alcalde de la localidad, Jacob Frey, expresó: “Creo en lo que vi y lo que vi está mal a todos los niveles. Ser negro en EE.UU. no debería ser una sentencia de muerte. Durante cinco minutos vimos cómo un agente blanco presionaba su rodilla sobre el cuello de un hombre negro. Durante cinco minutos. Cuando escuchas a alguien pidiendo ayuda, se supone que deberías ayudarle”.
Por su parte, la senadora de Minnesota Amy Klobuchar, excandidata a la nominación demócrata para la presidencia de EE.UU., dijo que “se debe hacer justicia para este hombre y su familia, se debe hacer justicia para nuestra comunidad, se debe hacer justicia para nuestro país”.
George Floyd should be alive today.
I'm calling for thorough investigations at the federal, state & local levels with @TinaSmithMN @IlhanMN @BettyMcCollum04.
Justice must be served & the officers & the police department must be held accountable to the fullest extent of the law.
— Amy Klobuchar (@amyklobuchar) May 27, 2020
El incidente refleja casi de manera exacta lo sucedido con Eric Garner, un hombre negro que murió mientras era arrestado en 2014 en Nueva York.
Garner, antes de morir, repitió once veces la frase “no puedo respirar”.
Ahí tampoco, el agente, los agentes, liberó (liberaron) la presión sobre su cuello, y según la autopsia, murió por estrangulamiento.
Ningún agente policial fue acusado formalmente de delito alguno por la muerte de Garner.
¿Sucederá lo mismo con la muerte de George Floyd?
por Roberto A
tal vez quieras leer: Racismo y Xenofobia: tres videos de última hora