Al parecer la estrategia de quemar neumáticos viejos pudiera “exportarse” a otras empresas de otras provincias, aunque no a todas las industrias.
El porqué con el cemento se explica claramente: esta es una industria que para la elaboración del producto, se precisa un altísimo consumo de energía.
El pasado 16 de febrero, el periodista cienfueguero Julio Martínez Molina nos daba a conocer que en la empresa Cementos Cienfuegos S.A. se utilizaba como combustible alternativo, la quema de neumáticos viejos debido a la crisis con el combustible que enfrenta la isla.
Martínez Molina decía que tal empresa se había convertido en “abanderada en Cuba” en ese aspecto, y el periodista explicaba que el método “contribuye a sustituir importaciones”.
Según la nota, “los neumáticos fuera de uso representan un serio problema de impacto ambiental”.
“Además de malgastar la energía y los materiales con los que fueron producidos, contribuyen a la expansión de enfermedades, al servir de refugio a insectos, amén de constituir un grave riesgo de alimentar fuegos,” recoge el Granma en su nota al tiempo que expresa que “cada año, en el planeta se desechan centenares de miles de toneladas de neumáticos inservibles.”
https://twitter.com/ThaliaCuba2020/status/1228435574891171848
Por extraño que parezca, la idea de quemar viejos neumáticos no es un invento cubano, aunque sí que llamó la atención a Yahoo News.
“Cobra fuerza, dice el Granma, su empleo como combustible en industrias como las del cemento y la papelera, donde se procesan, enteros o fragmentados, para asumirlos como combustible alternativo.”
Por raro que parezca, y aún cuando se reconoce “los alicientes ecológicos y ambientalistas consustanciales a su quema, al posibilitar la destrucción de inventarios nacionales considerados con riesgo potencial de contaminación,” otro aspecto pondera esta inventiva a nivel global.
“Entre las ventajas del uso de los neumáticos como combustible (está), el hecho de que producen la misma cantidad de energía que la gasolina, entre un 25 y un 50 % más que el carbón, y entre un 100 y un 200 % más que la madera.
De igual modo, recoge la nota, son “más baratos que los combustibles fósiles, reducen la necesidad de utilizarlos. Al sustituirlos por carbón en los hornos industriales, también se disminuyen las emisiones contaminantes de óxidos de nitrógeno y óxidos de azufre.”
Pero, ¿está preparada tecnológicamente la fábrica de Cemento Carlos Marx, en Cienfuegos, para la quema de neumáticos viejos en la sustitución de combustible?
Granma asegura que sí, y expresa que “certificaciones y autorizos por parte del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), del Ministerio del Interior (Minint) y de la Agencia de Protección Contra Incendios (APCI) validan los sistemas aplicados en las instalaciones de la fábrica, lo cual otorga al proyecto seguridad y confiabilidad.”
Tras el experimento en Cementos Cienfuegos, crecerá la iniciativa.
Al parecer esta estrategia pudiera “exportarse” a otras empresas de otras provincias, aunque no a todas las industrias. El porqué con el cemento se explica claramente: esta es una industria que para la elaboración del producto, se precisa un altísimo consumo de energía.
La empresa Cementos Cienfuegos S.A. contribuye a sustituir importaciones y disminuir el impacto ambiental de sus producciones. ¡Excelente!#TransporteCuba #SomosCuba🇨🇺 @DiazCanelB @PresidenciaCuba @MitransCuba @EduardoR_Davila @DirGemar @GemarOsdehttps://t.co/AdFUR2H96o
— Eliberto Domínguez (@edz1969) February 17, 2020
La empresa Cementos Cienfuegos S.A. no es una excepción, a pesar de su relativa modernidad.
La fábrica fue inaugurada el 29 de mayo del año 1980, en presencia del entonces gobernante cubano Fidel Castro Ruz.
Fruto de la colaboración con la entonces República Democrática Alemana (RDA), país socialista, desde el año 2001, opera en calidad de empresa mixta y bajo la denominación de Cementos Cienfuegos S.A. La fábrica produce cemento, “con una capacidad instalada de 1 500 000 toneladas de clínker al año y una capacidad de almacenaje de 48 000 toneladas en seis silos, cuatro de ellos destinados para la exportación.”
En el año 80, Cienfuegos se vislumbraba como la provincia de mayor desarrollo económico de Cuba. Era la única que tendría una refinería de petróleo; una fábrica de cemento moderna, y ya se trazaban estrategias para la construcción de la futura Central Termonuclear de Juraguá, un proyecto que nunca llegó a materializarse; y cuando comenzó a faltar el combustible en el llamado Periodo Especial, la Carlos Marx quedó prácticamente paralizada.
En los momentos actuales, según el criterio de varios especialistas consultados “se procesan al día entre 130 y 150 gomas de vehículos, y hasta la fecha suman más de 3 600,” y tienen hasta un plan: “llegar a la cifra de 400 neumáticos por cada jornada.”
Dice Granma que algunas empresas del país están transportando neumáticos viejos y se llevan cemento.
El método, por ahora, consiste en quemarlas “enteras”, aunque se estudia para un futuro inmediato, poder picarlas en partes más o menos iguales para aprovecharas mejor.
Según Granma, “los planes económicos de esta industria prevén que así sustituya el 5 % de su combustible tradicional, el pet coke, del cual espera importar unas 100 000 toneladas en el actual 2020.”
Datos:
- En noviembre de 2019, se lograron dos récords productivos para un mes como empresa mixta: 86 589 toneladas de cemento y ventas del mismo producto ascendentes a 85 230 toneladas.
- Al concluir 2019, fue sobrecumplido el plan anual de producción de cemento al 103 %, con 720 057 toneladas.
- En 2020 pretende exportar 150 000 toneladas de clínker, luego de permanecer un lustro fuera del mercado internacional.
El diario Granma da cuenta que la empresa estatal Cementos Cienfuegos S.A. quemando cada vez más neumáticos desechados como combustible.
– Sin controles estrictos emiten dioxinas y furanos, arsénico, cadmio, níquel, zinc, mercurio, cromo y vanadio que se dispersan y contaminan— David Morán (@morandavid) February 19, 2020