Las principales autoridades cubanas comparecieron este martes en la Mesa Redonda para informar sobre la batalla que librarán -eternamente, debido a la crisis económica perenne- contra coleros, revendedores y acaparadores de mercancías.
La Mesa Redonda, ese espacio televisivo que a raíz del descalabro económico y la presencia de la covid-19 en Cuba parece haber recobrado interés entre los cubanos, acogió ayer en su seno al primer ministro Manuel Marrero Cruz y otros dirigentes. Todo el tiempo televisivo fue con todo contra revendedores, coleros y acaparadores.
El espacio divulgó además una intervención del gobernante cubano Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez quien, también, salió a la batalla y sin cuartel contra los presuntos culpables -según el punto de vista oficial- del malestar actual en el país con relación a las tiendas, alimentos y a la escasez generalizada.
También se habló del coronavirus.
De todo lo expresado, que fue largo y bastante -toda una Mesa Redonda con un tiempo redondo de 1 hora y 57 minutos- resumiremos algunas declaraciones de interés.
Díaz-Canel dijo que se estaba actuando en interés y a pedido del pueblo, contra lo que llamó “cadena de coleros, revendedores, acaparadores”
En el jamo también cayeron los que trafican ilegalmente divisas, y englobándolos a todos el mandatario cubano expresó que ellos, hasta el momento, habían actuado con total impunidad.
“Se nos acumuló el problema, porque no enfrentamos la situación de manera inmediata”, reconoció.
En su intervención, Díaz-Canel precisó que se actuaría con responsabilidad, debido a planteamientos objetivos, relacionados con ancianos -por ejemplo- que hacen muchas colas al día y que hasta a veces hacen la misma cola dos y tres veces.
“No se está actuando contra el anciano o la persona humilde que necesita hacer la cola uno, dos y tres veces para resolver sus problemas, aquí no estamos actuando con el que hace la cola; por tanto el término colero hay que explicarlo bien”, aclaró el mandamás cubano.
“Estamos actuando, continuó el presidente, contra las personas que hacen la cola para lucrar, promoviendo la actividad económica ilícita”, y abundó que ser complaciente con ese flagelo “no conduce a nada bueno para la sociedad, al contrario, complejiza todos los procesos y molesta a las personas humildes que son la mayoría de nuestra población”.
Más adelante calificó este operativo como una “batalla” y expresó: “la vamos a echar para adelante. Actuaremos sin dar lugar a la impunidad, con severidad, pero con toda la justicia que hay que defender en estos casos. Estoy seguro que los casos en los que vamos a actuar son totalmente demostrables la culpabilidad y la legalidad”.
“Los coleros no pueden ser los dueños de la cola. “Hay que quitarle ese derecho que se han tomado y lograr que ellos sean desconocidos”, de manera “que la cola se ordene a partir de la gente que llegue físicamente al lugar”, expresó además.
En otro momento de su intervención, Díaz-Canel señaló que muchos de las críticas, obviarían lo que el Estado cubano ha considerado siempre “la madre de todos los problemas”: el embargo (bloqueo, según sus palabras) y reconoció el desabastecimiento en el país que, a su juicio, tiene en esta medida de los EE.UU. el principal enemigo y criticó a aquellos que no lo reconocen como tal.
“Los primeros que hemos reconocido que hay desabastecimiento somos nosotros como Gobierno y, en medio, de esta situación estamos tratando de dar un poquito más”. Pero “que el desabastecimiento no puede ser la causa para que haya ilegalidad, ese es un planteamiento deshonesto”.
“(El desabastecimiento) no (lo) asocian con el bloqueo sino con supuestas incapacidades del gobierno y el Estado cubanos”, fustigó.
Primer ministro Marrero Cruz contra coleros y revendedores
El Primer Ministro Manuel Marrero Cruz comenzó su intervención destacando el papel del pueblo cubano y dijo que, a la par de las complejidades provocadas por el coronavirus en el país, “nadie tiene derecho a enriquecerse a costa de nuestro pueblo”.
En ese sentido detalló “el plan” que abarca tres direcciones de trabajo, una de las cuales tiene que ver con la estrategia económica y social aprobada para enfrentar el impacto en el país de la crisis internacional; y otra, contra las violaciones de lo que está establecido, contra las ilegalidades.
“Estamos conscientes de que tenemos problemas graves”, reconoció el primer ministro y añadió:
“Ha habido un incremento en el enfrentamiento a aquellas personas que han intentado enriquecerse a costilla de las necesidades del pueblo”.
En su intervención ponderó la acción del pueblo.
noticia relacionada: Gobierno de Cuba anunciará medidas contra coleros y revendedores
Dijo que serán transparentes, que informarán al pueblo sobre las medidas tomadas y contra quiénes.
“Ya sea una persona privada o una empresa o un funcionario estatal”, aclaró y a la mente de muchos vino el nombre de la Vicepresidenta de la Corporación CIMEX S.A., envuelta ahora mismo en un sonado escándalo de corrupción del cual nadie, “oficialmente”, ha dicho nada.
Marrero Cruz señaló que este es “un fenómeno incompatible con la sociedad en que vivimos” y apuntaló una frase:
“Nadie tiene derecho a enriquecerse a costilla de nuestro pueblo”.
“(las colas) no son un fenómeno nuevo, las hemos visto en países desarrollados debido a las circunstancias generadas por la COVID-19”, explicó sin entrar en el detalle más importante: “afuera”, las colas son menos largas y lo que se acaba, se repone de inmediato.
“El problema está cómo organizamos esa cola para que no sea un lugar de riesgo en esta pandemia y que no se convierta, sobre todo, en el negocio ilícito de un grupo de personas, que es lo que ha venido sucediendo”.
Luego dijo que los coleros hacen la cola “para beneficiarse y cometer actividades económicas ilícitas.”
“Detrás del colero viene el acaparador y luego el revendedor”.
Marrero alabó el papel de la Policía Nacional Revolucionaria y las Fuerzas Armadas Revolucionarias, en la organización de las colas, pero dijo que los coleros se han autotitulado “los organizadores de la cola”, y han buscado formas para hacerlo como “enmascarándose, escondiéndose en casas, e incluso subiéndose en árboles cercanos”, cuando en realidad los que se esconden no son solo los coleros, sino personas comunes y corrientes que hacen las colas de madrugada para poder comprar algo. Algo que les permita alimentarse. Subsistir.
“A veces se ponen de acuerdo con algún trabajador del establecimiento, acaparan los productos, y los esconden en una casa o centro de trabajo cerca. Luego, los comercializan en redes sociales y por teléfono, a un precio que es el doble o triple”, expresó.
Más adelante habló de turnos en las colas que se venden hasta en 100 CUC y del acaparamiento.
Compradores virtuales y reales
En la compra en tiendas virtuales -las pocas que existen y que malfuncionan- y en aquellas tiendas recientemente abiertas en MLC, Marrero expresó que “se han incorporado a ello personas inescrupulosas y que venían desarrollando una actividad económica ilícita cuando salían al exterior a comprar mercancías en grandes cantidades para después revenderlas en el país.
Dijo que hay más de 1 300 personas que han sido detectadas en esas actividades; recordó que la ley penaliza la reventa de mercancías, y que esto clasifica como un delito de actividad económica ilícita.
De esas 1300 personas detectada, unas 280 personas han sido procesadas penalmente por reincidir luego de ser multadas, señaló Marrero Cruz.
“Cuando las personas asumen actitudes de incomprensión no nos puede temblar la mano para aplicar la justicia, según corresponda”.
Luego habló de los grupos de enfrentamiento creados, que en el país suman ya 3 054 grupos de enfrentamiento integrados, con 22 281 personas dentro de ellos; y dijo que en estos son parte activa, integrantes de organizaciones de masas como los CDR, FMC, CTC, núcleos zonales, PNR, FAR y personal de las tiendas.
(con información de medios oficialistas cubanos)
por Ariel P.
tal vez quieras leer: Gobierno cubano crea grupos contra coleros y revendedores
There is no ads to display, Please add some