Jair Bolsonaro dio declaraciones al salir del hospital. Entre lo que dijo, señaló que “la vida continúa” y que está bajo los cuidados de la primera dama.
“Estoy siendo vigilado por la primera dama, que manda bastante,” dijo entre bromas esta mañana Jair Bolsonaro al salir del hospital donde acudió a hacerse un test de coronavirus y en el que, lamentablemente, dio positivo.
“Voy a trabajar por videoconferencia. No podré escapar de la rutina desde aquí”, explicó Bolsonaro para luego informar que canceló una reunión que tenía prevista para el viernes.
Bolsonaro habló de su visita al lunes a la Prefectura de la Policía Federal de Carreteras, y sobre el decomiso de drogas en el país y elogió el trabajo de la policía.
Al referirse al aumento de la cantidad de muertes en Brasil por el coronavirus expresó: “Ha aumentado mucho debido a otras causas, no por el virus sino por el miedo al virus.”
“El pánico también mata, es lo que puedo decirles a todos desde aquí. Este virus es casi, como ya dije en el pasado y fui ampliamente criticado, como si una lluvia te golpeara.”
“Para algunos no. Algunos tienen que tener cuidado con este fenómeno, por así decirlo. Desafortunadamente sucede y repito aquí que las personas de cierta edad que tienen un problema de salud o que tienen la posibilidad de contaminarse, deben cuidarse”.
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Bolsonaro dijo que esta mañana se sintió fiebre de 36.7, y señaló a la pregunta de la supuesta “desescalada” en el país, de que no piensa que se debió hacer como se hizo.
“Mira, no actuaría de esa manera como se hizo. Ya he hablado en el pasado y he sido muy criticado, pero yo solo di una opinión en términos de sufrir las consecuencias en el momento de contagiarnos con la pandemia”.
El mandatario precisó que se haría un segundo examen médico para ratificar la condición.
“Las personas que tuvieron contacto conmigo aquí en el palacio ahora incluyen a la primera dama. Ella se hizo el examen,” añadió, pero no brindó detalles.
“El equipo médico se queda aquí en La Alvorada pero solo para ayudar a mi familia. Tenemos un poco más de 100 personas trabajando en este complejo aquí, en el Palacio de La Alvorada, en la construcción, además de aproximadamente 100 militares, que son la seguridad aquí. Como anteriormente dije, estoy al 100% y me gustaría volver a trabajar. Estoy un poco impaciente, pero seguiré el protocolo.
“La vida continúa. Todo el mundo está en gran parte preocupado por el final de su actividad laboral. Brasil tiene que salir adelante. Tenemos que volver a trabajar porque de lo contrario la economía puede ponerse en una situación muy compleja como dije en el pasado. No puedes combatir el virus si el efecto secundario de esa lucha es peor que el daño causado por la vida misma.
“Solo tenemos que dejarlo atrás,” señaló.