Alarmado tal vez por los números de infectados de coronavirus en la Florida, o tras haber escuchado que todas las provincias cubanas pasaron a la fase 3 de la desescalada, con excepción de La Habana y Mayabeque, el médico norteamericano residente en Florida, Graham Sowa, uno de los contados médicos de EE.UU. graduados en la Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas de Cuba, se fue por otros caminos “analíticos” y lanzó una de sus habituales defensas al sistema de salud de la isla, al “sugerir” que EEUU necesita un sistema de salud como el de la isla.
De esa y otra manera no pueden entenderse sus comentarios, aunque la realidad es que lo que Florida necesita es medidas enérgicas de contención de la enfermedad, y no “médicos” como los cubanos, o peor aún: un sistema de salud como el de Cuba.
No se trata de médicos, sino de voluntad. A veces hasta de privación de derechos civiles, algo que el gobierno cubano ha entendido, maniobrado y ejercitado a su antojo durante años y que, ahora con el coronavirus, le ha venido de perilla: aislar del resto.
Por imposición (Cuba) por voluntad propia (China, España, Italia) o por disciplina (Eslovenia, Portugal), lo cierto es que el problema del coronavirus en Florida y en el resto de los estados de los EE.UU. no es precisamente que se necesite un sistema de salud como el de Cuba, sino concientizar y concientizarse; respetar para ser respetados.
Sí, porque de nada sirven las medidas si nadie toma conciencia de las irresponsabilidades que cometen los semejantes. El diario Daily Mail recogía en las últimas horas el caso de un chico de Plantation que se fue para una fiesta, no se cuidó, se infectó de coronavirus y quien peor parte llevó de su accionar irresponsable ha sido su padre, que ahora se debate entre la vida y la muerte.
No, EE.UU. no necesita un sistema de salud como el de Cuba para contener el coronavirus. Eso es falso, doctor Sowa.
En entrevista vía Skype con la agencia oficialista Prensa Latina, Sowa dijo que en EE.UU. hay mucho que aprender de Cuba; un país que “se adelanta y puede prevenir”; y valoró que el sistema de salud en EE.UU., desafortunadamente, no está diseñado para esto.
“En el sistema de salud de Cuba lo que importa la salud de la población”, acotó el graduado en La Habana.
Al referirse a Florida lo asumió como “un fallo en el control de la pandemia” y manifestó que solo en la Florida se diagnostican de ocho mil a 12 mil casos nuevos todos los días.
“La gran parte de nuestra población vive sin acceso a servicios de salud confiables, a medicamentos garantizados y a médicos de la familia”, enfatizó el galeno.
“Un médico no puede enfocarse en el que tiene o no, un médico debe enfocarse en el ser humano y eso lo aprendí en Cuba“, puntualizó al intentar establecer una diferencia.
Una diferencia que moriría de pena si se le comparase con medidas que se han tomado en otros países y entre los cuales mencioné dos ejemplos encima: Eslovenia y Portugal. A ellos pudiéramos sumar otro: Nueva Zelanda.
El resto de la entrevista con este graduado en La Habana giró sobre política.
por Ariel P.
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Pueden decir lo que les parezca, pero solo una cosa, quitenle el bloqueo a Cuba y entonces que demuetren, lo demás es que les duele que con pobreza se logre más que con tanta riqueza.
buenos días, wendy. gracias por leernos pero hay que aprender a respetar a los que piensan diferente. es la base de una convivencia por la que debería apostar cualquier nación para prosperar debidamente. saludos