Pieza clave en el tratamiento dado a Dilan es una doctora de nombre Dunia, pero de la cual se desconoce su apellido. Apenas Dilan tuvo su primera fiebre de 37 grados, la doctora no perdió tiempo y lo reportó.
Dilan, el primer niño positivo a la COVID-19 en Cuba espera junto a su madre, Liliana, por la salida del hospital en que se encuentra ingresado. Ambos están próximos a cumplir el periodo de aislamiento de los 14 días, y parece que sí, que el pequeño Dilan y su madre Liliana, le dirán ADIÓS al coronavirus.
Con tan solo 18 meses de edad Dilan y su madre se encuentran en una de las salas del centro de aislamiento ubicado en el hospital militar Joaquín Castillo Duany, de Santiago de Cuba.
Fue el pasado 22 de marzo cuando Dilan se convirtió en el primer niño positivo a la covid-19 en Cuba. Desde entonces, los desvelos han sido grandes. No solo de su madre, también los médicos del lugar donde se encuentran, y las enfermeras, les han dado de todo: medicinas y amor.
«Cuando la prueba del niño dio positivo, lo primero que hice fue llorar mucho, tenía miedo. Casi enseguida supe que yo también portaba el virus», contó a Granma su madre.
Desde ese día han transcurrido once días más, y la evolución hasta el momento es satisfactoria.
Ambos viajaron a España y regresaron en la ruta Madrid-Santiago de Cuba el día 17 de marzo.
Ninguno de los dos presentaba síntomas de la enfermedad al pasar por el control sanitario en el aeropuerto “Antonio Maceo”. Liliana cuenta que llegó a Guisa y enseguida salió a realizar compras; a saludar amigos y familiares.
«Por eso fue más difícil cuando recibí la noticia, porque sabía lo que significaba. Sin sospecharlo, había puesto en riesgo a gente muy querida para mí, e incluso a personas que no conocía, pero afortunadamente no llegamos a propagar el virus», señala la joven de 26 años al diario Granma.
Pieza clave en este proceso parece haber sido una doctora de la que Liliana dice no recordar su apellido, pero sí su nombre: Dunia. Apenas Dilan tuvo su primera fiebre de 37 grados, la doctora no perdió tiempo y lo reportó.
«Nos llevaron primero al policlínico Guillermo González, de Guisa, y de ahí nos trasladaron en ambulancia hasta el hospital infantil Norte, de Santiago de Cuba, donde nos hicieron las pruebas a los dos, aunque yo me mantenía asintomática.
«Fueron dos pruebas y el resultado fue positivo,» revela.
«Aquí Dilan tiene su propia cunita y ha estado todo el tiempo conmigo, porque ninguno de los dos tenemos síntomas; pero aun así, a mí me han dado los medicamentos, como el Interferón, y al niño, además del tratamiento que recibe para el nuevo coronavirus, le están atendiendo una neumonía que se le descubrió en estos días.
«Eso implica que le den medicinas hasta tres veces al día y lo inyecten dos, pero los enfermeros y médicos son muy cuidadosos, siempre realizan el procedimiento tomando todas las precauciones.
«También lo miman mucho. Desde que llegamos, yo dije las cosas de comer que le gustaban y se las preparan a su gusto, y además de la leche, el yogurt, el refresco y las otras meriendas, le traen el platanito maduro porque le encanta».
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