Tras la censura en la televisión cubana de la escena final de Love Simon, película con temática homosexual, se convocó a una besada gay
Una besada pública fue convocada en la tarde de ayer domingo, primero de marzo, por activistas de la comunidad LGBTI en Cuba. Con banderas de arcoíris, todo aquel que se sintiera identificado con la causa podía asistir a 23 y M, sede del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT).
La censura de la escena final de Love Simon, película con temática homosexual transmitida el pasado día 29 en el programa Pensando en 3D, generó el descontento en la comunidad cubana, que no dudó en lanzarse a la calle para exigir las disculpas públicas del organismo rector en materia televisiva, así como la retransmisión íntegra del filme.
“Parece mentira que en este país sucedan cosas como esas: los videos de reggaetón, en los que salen mujeres semidesnudas, son normales; es normal la discriminación racial, de la mujer, el maltrato animal, pero no que dos hombres se besen”, señala Gabriela, una de las activistas que estuvo en 23 y M.
La invitación quedó hecha mediante las redes sociales. Luchadores por los derechos LGBTI convocaron a la acción, movilizándose desde provincias aledañas como Matanzas, Artemisa y Mayabeque.
Unas horas antes de que se concretara, la página oficial del ICRT lanzó un comunicado en el cual calificaba de “error” lo sucedido: “informamos que se realiza el correspondiente análisis, pues la omisión no responde a posturas homofóbicas del ICRT y sus directivos de la TVC, como algunos han referido en las redes sociales”, se explica.
La institución añade además que la película será retransmitida en el mismo horario y espacio, con previo aviso a la teleaudiencia. Con esta declaración, las posturas se dividieron sobre si realizar o no la besada.
El activista Yadiel Cepero fue uno de los que abogaron por el no, pues consideraba que “con el objetivo en las manos, es mejor ser recíprocos y cancelar la actividad”. Una buena parte de la comunidad no pensaba igual.
Álvaro asistió, aun cancelada la marcha, pues para él “error no es una palabra para calificar semejante acto de censura. El motivo estuvo relacionado al horario del espacio, consumido por pequeños en ocasiones. La familia homosexual existe en Cuba, pero mostrarla tal cual sería promoverla, apoyarla, ayudarla a multiplicarse; y no quien eso”, detalla el joven. “Además, nuestro deber era ir, que no se suspendiera aun con Jancel secuestrado”.
Desde las primeras horas de convocada la acción, el activista matancero de 20 años Jancel Moreno, recibió constantes amenazas para no presentarse. En su perfil de Facebook denunció la llamada de un número desconocido. Le dijeron: “Esto es fácil, tú sabes quién soy. Si mañana te veo que pones un pie en El Vedado, vas detenido. Tú sabrás lo que haces”.
Sin amedrentarse lo más mínimo por esta advertencia, Moreno se dispuso a viajar a La Habana en compañía de su pareja, pero fue detenido a la salida de Matanzas, y llevado a un punto desconocido, donde debió aguardar hasta el fin de la besada.
“Dos oficiales nos interceptaron en el Viaducto y nos llevaron para una casa, alegando que la manifestación no era necesaria pues el ICRT ya se había disculpado”, declara. Como él, otros activistas fueron retenidos para impedirles participar.
El portal digital 14ymedio publicaba asimismo que “la curadora de arte Claudia Genlui Hidaldo denunció en vivo a través de Facebook que la Seguridad del Estado arrestó de manera violenta al artista Luis Manuel Otero Alcántara. Además contó que a ella una oficial de la policía la golpeó en el momento en que los dos salían de la casa de la calle San Isidro para quitarle su celular”.
Las redes sociales han sido un importante medidor en este caso. Algunos consideran innecesaria la manifestación, alegando que en Cuba hay causas más importantes para defender.
Por su parte, el activista Luis Ángel Adan Roble, único diputado gay en la Asamblea Nacional, y que dimitiera por incongruencias con el CENESEX, manifestó su preocupación ante la ola de comentarios y actitudes homofóbicas desatados.
Luis Ángel expone algunos de estos pareceres, que “van desde el hecho de extinguirnos o que deberíamos tener un presidente como Vladimir Putin… Es necesario, pero ya, una estrategia comunicacional importante, dentro de dos años se pondrá en juego el derecho de muchas familias”, finaliza el joven.
Comentarios como: “Es hora de que en la TV restrinjan tanta depravación”, “Por qué querer imponer algo que para ellos es correcto y para la mayoría no” o “es increíble que dentro de poco es obligado ser homosexual”, son algunas de las opiniones que contrariaron a Luis Ángel Adan Robles.
María Carla Prieto
Creo que hay mejores cosas porque manifestarse que por la censura de un par de maricones besandose en la boca cuando este es un programa que lo ven hasta los niños, yo tengo uno de cinco años que no me gustaria que viera esas pajarerias, acaso no se dan cuenta de la magnitud de esto, solo pido que tengan consiencia de lo sucedido los homosexuales no pueden imponer sus preferencias a los demas.