Cuba, país que importa entre 1800 y 2000 millones de dólares anuales de comida, importará frijoles desde Argentina, un cargamento que llegará en febrero.
Un cargamento de frijoles arribará a Cuba en febrero, algo que pudiera parecer hasta inaudito, teniendo en cuenta que en la isla caribeña al menos, no pocas tierras permanecen ociosas, llenas de marabú y que muy bien pudieran utilizarse para la siembre del grano.
Sin embargo, la isla continúa fiel a la tradición de importar alimentos, alimentos que muchas veces ni se pagan, según rezan las leyendas desde dentro del Ministerio del Comercio Exterior de la República de Cuba, donde mensualmente se reciben llamadas de proveedores pidiendo les paguen sus productos vendidos a Cuba hasta con años de “atraso”.
En el caso de los frijoles argentinos, la prensa, desde ese país austral informa que son 240 mil bolsas de frijoles; un cargamento que saldrá hacia Cuba mediante la terminal fluvial en Santa Lucía.
«Son como 400 viajes y algo así de 50 o 60 personas por día en Santa Lucía y otro tanto en San Pedro y después en el puerto deben ser otra cantidad parecida por turno», indicó un directivo de la compañía.
Cuba importa entre 1800 y 2000 millones de dólares anuales de comida, principalmente cereales, arroz, frijoles, maíz y soja, así como leche en polvo y pollo. Economistas desde dentro de la isla calculan que se requiere al menos un salario medio de 2800 pesos solo para atender las necesidades alimenticias, lo que representa un 84% de sus alimentos, según diera a conocer recientemente la viceministra de Economía y Planificación, Magalys Calvo.
El Estado posee el 80 por ciento de la tierra. El resto se lo arrienda a los agricultores y las cooperativas, pero cifras dadas a conocer esta semana hablan de que un 58% de la tierra que pudiera darse a los agricultores no se les ha entregado por razones meramente burocráticas.
Según datos de la OEC, Cuba es la 138º mayor economía de exportación en el mundo y la economía más compleja 75º de acuerdo con el Índice de Complejidad Económica (ECI).