Estos dos exponentes del arte del picheo dejaron sus nombres grabados en la historia del béisbol cubano. ¿Rogelio García o Norge Luis Vera?
Dos de los mejores lanzadores que han pisado un montículo en Series Nacionales llegan hoy a la sección comparaciones beisboleras. Uno de occidente y el otro de la región oriental, ambos dominaron a su antojo a sus rivales al punto de convertirse -en épocas diferentes- en el lanzador número uno de sus respectivos equipos provinciales y en la selección nacional. ¿Rogelio García o Norge Luis Vera?
Dotados de excelentes herramientas para este deporte, estos dos exponentes del fino arte del picheo dejaron sus nombres grabados en la rica historia del béisbol cubano. ¿A cuál escoges para abrir el juego decisivo de tu vida?
“El ciclón de Ovas”, Rogelio García
Temerario, dueño de una velocidad aterradora y un lanzamiento de “tenedor” poco habitual para su época, este pinareño se mantuvo en el box durante 16 campeonatos nacionales burlando adversarios. Fue catalogado en su momento como el lanzador más dominante, al menos de la etapa que le tocó vivir.
Coronado como el rey de los ponches en siete ocasiones (cuatro de ellas de forma consecutiva), apenas le faltó uno para llegar a los 2 mil 500, demostrando así su tremenda capacidad para humillar a los bateadores por la vía más amarga.
Es uno de los pocos serpentineros en Cuba en arribar a la marca de 200 victorias (202) y dejó en su currículo un impresionante promedio de carreras limpias por juego de 2.39 y un average de contrarios de solo 208 en más de 9 mil 400 veces al bate, récords increíbles en una etapa donde se usaba el bate de aluminio.
En su bitácora también se guardan un par de juegos lanzados sin permitir imparables ni carreras y otro en el que dejó a 24 bateadores con “la carabina al hombro” y que duró 16 capítulos.
Con la selección nacional participó en cuatro Campeonatos Mundiales, dos Juegos Centroamericanos, tres Panamericanos y cuatro Copas Intercontinentales. Alcanzó un total de 39 éxitos y la medalla dorada en la mayoría de estos torneos.
“El látigo”, Norge Luis Vera
Flemático, de pocas palabras y una disciplina extrema en el terreno de juego, este santiaguero poseedor de una slider letal fue un látigo implacable para sus adversarios durante las 17 campañas que se mantuvo en la lomita.
Pieza clave en la llamada aplanadora santiaguera de principios de siglo, tiene el récord para su provincia en una serie al lograr 17 victorias con 8 lechadas incluidas y un promedio de limpias de 0.97; todo logrado en la edición del año 2000. Un año después, al ponchar a 135 rivales, siguió ampliando la cosecha y se colocó en la cima de todos los lanzadores del país.
Su promedio de ganados y perdidos de 721 -con un balance de 176-68- es uno de los más altos logrados por un lanzador en la historia de estos eventos nacionales.
Logró ponchar a 1 271 contrarios (5.56 por juego de nueve entradas) y dejó para la posteridad un PCL de 2.69, un Whip de apenas 1.15 y un average de bateo rival de 269, para demostrar con números el total dominio que ejercía en los desafíos.
Participó con el equipo nacional entre otros torneos de importancia en tres Campeonatos Mundiales, tres Juegos Panamericanos, un Clásico Mundial, y dos Juegos Olímpicos (Sidney 2000 y Atenas 2004).
Roque Díaz
