En la playa de 1ra y 70, cestos de ecomadera se distribuyen por todo el paseo marítimo
El paseo marítimo de 1ra y 70 muestra una vista nueva alrededor del lugar. Cestos de ecomadera, así se llama la reciente iniciativa que acompaña la playa. El proyecto, según sus promotores, trata de vincular “belleza, cultura y ecología” en una apuesta por un futuro diferente.
Los pequeños tanques de ecomadera se distribuyen por el lugar y garantizan, al menos, la limpieza del área aledaña a los quioscos artesanales, bares y restaurantes.
“Con ellos hay más organización”, comenta uno de los vendedores del lugar. “Cuando se inauguró el sitio casi no había dónde echar la basura. Los cestos eran de hierro, abiertos y se les salía todo lo que botabas. Eso incomodaba a las personas, que no concebían que un espacio recién inaugurado estuviese lleno de desechos”.
Detrás de la iniciativa se encuentra la Cooperativa No Agropecuaria Atres, surgida en el 2014 en la provincia de Matanzas con el objetivo de producir artículos a partir de un nuevo material que se obtiene en el reciclaje mediante la combinación de varios residuales (ecomadera).
La ecomadera es un tipo de plástico “que no sufre ataque biológico ni se agrieta, no necesita mantenimiento y tiene alta capacidad de adaptación, durabilidad y resistencia”, precisan los impulsores del proyecto quienes han logrado asociarse en otras localidades del país como Pinar del Río, Cienfuegos y La Habana.
La decoración de exteriores ha sido desde el inicio una de las metas de estos emprendedores cubanos. Sus artículos de ecomadera sirven para dar vida a las playas y otros espacios naturales que necesitan de una renovación estética y que mejor manera de hacerlo que fusionando la protección al medio ambiente con productos útiles para la población.
“Mientras las personas vean el área recogida, tratan de mantenerla, sobre todo los turistas que son el público que atendemos en su mayoría. A nadie le gusta comer mirando por la ventana las latas, los papeles, las colillas de cigarro y los desechos de comida. Eso resta presencia y nos pone en una posición perjudicial para atraer personal. Por suerte no es así, y en parte se debe a los cestos”, declara el dependiente de uno de los restaurantes del complejo Tritón.
A María, una extranjera que se hospeda en el Hotel Panorama, le llamó la atención la pulcritud de la costa, la tranquilidad y la belleza natural que se observ,a libre de contaminación.
No es la primera vez que el grupo crea mobiliario para los centros estatales. El pasado año el Parque Nacional de Guanahacabibes fue dotado de un stock completo que incluía sombrillas bancos, elementos ornamentales, pérgolas entre otros objetos producto del reciclaje y el rescate de varios materiales.
Recientemente, la Cooperativa No Agropecuaria Atres estuvo nominada a los Premios de Excelencia Turística Verde y Azul por incentivar el cuidado y protección al medio ambiente, así como por la asociación de su trabajo con actividades de recogida de desechos y materias primas que luego utilizan para sus creaciones.
Estas nominaciones se hacen a espacios e instituciones afines con el turismo ecológico y de naturaleza que en los últimos tiempos Cuba ha potenciado como alternativa al turismo tradicional, para atraer otros visitantes a partir de los encantos naturales de la isla.
La Cooperativa No Agropecuaria Atres, no piensa limitarse a estas creaciones de ecomadera. Para el 2020 tienen en mente una línea de producción con desechos de gomas, vidrio y papel.
Texto y fotos: Vladia Rosa García
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