El colega de los conductores de la estatal Transtur divulgó imágenes en un post de Facebook que tituló “Transtur es grande entre los grandes”.
Los cinco conductores de ómnibus de la estatal Transtur que trasladaron a los cruceristas del MS Braemar desde el puerto del Mariel, hacia el aeropuerto internacional “José Martí”, en La Habana, Cuba, se encuentran bajo observación debido al coronavirus.
Aunque según las imágenes que divulgó un colega de ellos, se aprecia que “cumplieron la misión” bajo estrictas medidas de seguridad, el Ministerio de Salud de Cuba, y el gobierno que preside el mandatario cubano Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, han decidido no correr riesgos, y los han aislados “bajo observación”.
Se trata de los choferes David Grau, Dagoberto Contreras, Inti Rojas, Gonaivy González y Bernardo Montoya, (de izquierda a derecha en la imagen), todos trabajadores de la base de transporte de TRANSTUR de la CUJAE, en la capital.
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Según divulgó la estatal oficialista Radio Surco, los cinco permanecerán en observación durante 15 días en el Centro de Pesquisaje, aunque solo llevaron a aquellas personas que no mostraban síntomas de tener el COVID-19, y viajaron protegidos con guantes de goma y mascarillas.
Radio Surco divulgó que luego de transportar los cruceristas, los choferes fueron llevados a un centro asistencial donde fueron desinfectados. Por si fuera poco, sus ómnibus se parquearon lejos de los otros y también recibieron un tratamiento de limpieza con productos químicos.
A pesar de todas esas medidas de protección absolutamente seguras, se encuentran bajo observación pero, según se deja ver en la imagen, contentos “con el deber cumplido”.
El colega de los conductores que divulgó las fotos es otro chofer de la estatal Transtur. Este, en un post que tituló “TRANSTUR ES GRANDE ENTRE LOS GRANDES”, expresó:
“Cuando Cuba, el país calumniado y bloqueado, accedió a la petición del Gobierno del Reino Unido, de dejar entrar al Crucero para evacuar a los turistas y su tripulación, los choferes de la Base de TRANSTUR la Cujae en La Habana, sentenciaron, “nos toca esa compleja tarea”.
Aún cuando sabían de la peligrosidad que entrañaba, nadie “patinó”; pero todos no podíamos ir, la dirección de la entidad ya había planificado hasta el detalle para reducir los riesgos.
Tomaron en cuenta la advertencia de las autoridades sanitarias y seleccionaron conductores jóvenes, para que en caso de contraer el nuevo coronavirus, tuvieran mayor posibilidad de sobrevivencia.
Luego continuó expresando:
“Mis valerosos y ariesgados compañeros, condujeron “forrados” en la ya histórica caravana y tras el regreso y luego de pasar por un centro especializado, donde serán desinfestados y vestidos con nuevas prendas, sus respectivos buses, parqueados distantes de los demás, recibirán un tratamiento riguroso.
Los dos ómnibus Yutóng que observan de forma impecable, son en los que viajarán conducidos por ellos mismos, hasta el centro donde serán pesquisados por los facultativos durante 15 días.
Que no se me molesten los colegas de la Prensa, pero hoy siento particular y sano orgullo al pertenecer a este colectivo, porque TRANSTUR ES GRANDE ENTRE LOS GRANDES.”
