Oficiales del MININT en Guantánamo dieron “el paletazo” del siglo, al actuar contra un grupo de funcionarios corruptos del sector de la Gastronomía.
Funcionarios de la Empresa de Gastronomía en Guantánamo vivieron durante un tiempo confiados en que su “modus operandi” para adulterar precios, enmascarar traspasos y otras triquiñuelas propias de quienes trabajan con mercancías en los almacenes pasarían desapercibidas. Sin embargo, un operativo del MININT en Guantánamo “se les embasó” y el resultado es el siguiente: les fueron ocupados equipos de refrigeración, de audio, splits, computadoras, motorinas, prendas y dinero. Todo eso, dice el reportaje transmitido por el NTV, producto de las ilegalidades.
A uno de estos “cuadros”, que seguramente son militantes de la UJC o el PCC porque en Cuba, los funcionarios suelen ser militantes de esas organizaciones que “agrupa a lo mejor” de lo que una vez llamaron “El Hombre Nuevo”, le ocuparon hasta un jeep. Al parecer olvidó que ese beneficio está reservado para los miembros de “la familia real”.
Señala el reportaje que estos funcionarios de la Empresa Municipal de Gastronomía en Guantánamo “metieron las manos” en la distribución de los productos, que se comercializaban por la empresa mayorista de alimentos y otros bienes de consumo, hacia gastronomía.
Un “cuadro” del MININT en Guantánamo, entrevistado por el NTV dijo que “a partir de varias incidencias que venían produciéndose con la empresa de Gastronomía Guantánamo” es que ellos se decidieron a realizar el operativo policial.
“Funcionarios y trabajadores de esta empresa venían dedicándose a desviar hacia el mercado informal de volúmenes y niveles considerables de mercancía,” expresó el Mayor Luiván Medina Santos, Segundo Jefe de la Unidad del Órgano de Investigación Criminal en Guantánamo.
“(la mercancía) la trasladaban con ánimo de lucro y no llegaban a sus almacenes principales”, agregó.
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Se suponía que esta distribución terminara en restaurantes y cafeterías del territorio para lograr la prestación del servicio a la población, pero otro rumbo tomaba la misma.
El reportaje señala que “el desvío de los recursos del Estado hacia el mercado informal en el trimestre marzo, abril, mayo arroja hasta el momento una suma de alrededor de 3 millones de pesos en pérdidas a la economía nacional, lo cual refleja las debilidades que aún existen en los sistemas de control interno”.
“En estas empresas se aprecian varias fisuras que no han permitido organizar de manera directa el control y seguimiento a las mercancías y productos que se destinan hacia sus restaurantes y cafeterías,” sentenció el Mayor Medina Santos.
Sin embargo, lo más significativo es que, durante la investigación de este hecho, surgieron otras “irregularidades”.
El reportaje del NTV lo resume así:
“Como parte de las investigaciones se trabaja en un segundo caso en que se demostró el desvío hacia el mercado negro de malta Bucanero y cerveza Hatuey embotellada. Esos productos se facturaban y despachaban por la unidad empresarial de base 691 mercado paralelo, pero nunca llegaron a su destino: las unidades de comercio y la gastronomía“, por lo que habrá que esperar nuevos reportajes similares donde apreciaremos seguramente como otros “hombres nuevos” sucumbieron a los “encantos” de la corrupción; un vicio que el difunto gobernante Fidel Castro Ruz -sin mirar, claro, hacia el interior de su familia y amigos más allegados- continuamente señaló como un “defecto del capitalismo”.
por Ariel P.
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