En redes sociales se han vuelto virales varios videos de una impresionante concentración de personas que se reunieron en Cuba para adquirir productos de aseo este lunes.
“No es una protesta, es la cola de Pinar del Río”, escribió en su cuenta de Twitter el usuario Mag Jorge Castro, quien comparte una grabación en la cual se ven a cientos de personas encimadas en una calle, mientras intentan organizar una cola.
El autor filmó a la multitud desde una posición privilegiada, a varios metros del nivel del suelo, desde donde se puede apreciar en su total dimensión como casi bloquean la calle por completo.
No es una protesta, es la cola de Pinar del Río😑#Vergüenza pic.twitter.com/6U2sEME8q5
— Mag Jorge Castro🇨🇺 (@mjorgec1994) August 18, 2020
El mismo material fue publicado en el perfil de Facebook del conocido Alain Paparazzi TV, quien dice que “esto ocurrió hoy en Pinar del Río en la tienda La Mía para poder comprar jabón y champú”.
Tal vez desees leer Cuba: Enferma y tiene que hacer la cola
El llamado Paparazzi cubano publica un segundo video desde el nivel de la calle, en medio de la gigantesca cola, donde las personas se agolpan sin mantener ningún tipo de distanciamiento social.
“No me empujen a la familia”, pide uno de los presentes entre los gritos de los demás, mientras otros advierten, que “no vengan a empezar a meterse” y se apretujan para no dejar entrar a nadie más.
Debido a la escasez de alimentos y otros productos que vive al isla se reportan aglomeraciones similares a la que se vivió en la descomunal cola de Pinar del Río, que tuvo lugar en una zona muy céntrica de la urbe, cerca del popular Coppelia.
Meses atrás, la periodista Elsa Ramos, del medio oficialista Escambray, escribió un trabajo bajo el título de “Colas sintomáticas”, en el cual afirmaba que “en los tiempos que corren es bueno que existan colas. Y explico rápido antes de ganarme una gritería de esas que, lastimosamente, las afean. Cuando usted ve un mercado, una tienda o un simple punto “poblado” de personas, la señal es evidente: algo hay. Y eso es bueno en tiempos en que el país ha debido hacer malabares para traer hasta esta isla parte de lo que nos hace falta. Por eso cuando la quietud reina en los comercios es señal de que los estantes están vacíos o, al menos, no tienen lo que se busca. Y eso es menos saludable que las colas”.
Quizás quieras leer Las colas son buenas, dice la prensa oficialista
Julio Linares