La crisis del coronavirus empujó al cubano Javier Bulit a vivir, junto a su esposa, dentro de su auto en el parqueo de una tienda de HomeDepot en North Miami.
Sin embargo eso parece ser ya cosa del pasado, luego de que un reportaje de la cadena Telemundo impulsara a buenos samaritanos residentes en la comunidad a darle una mano al joven.
Ya tienen techo y trabajo, según reveló el periodista Yusnaby Pérez.
Luego de la conmoción que generó la noticia de que dormían, desde hace más de tres semanas, en el parqueo de una tienda de HomeDepot, tras haber perdido trabajo y casa debido a la crisis generada por el coronavirus, varios residentes en la comunidad decidieron echar una mano por sacar a este hombre de las calles. La pareja ha ido a vivir temporalmente a un motel.
En apenas 72 horas la vida del cubano Javier Bulit dio un vuelco de 180 grados. El hombre ha comenzado a salir “a flote”, y hasta le salió “un trabajito”.
Uno de esos buenos samaritanos que le tendió la mano a Bulit es Axel Bages. Bages confirmó a Yusnaby Pérez, periodista de Telemundo, que Bulit ya no está durmiendo junto a su esposa en el interior del auto.
Por si fuera poco, apareció una señora que dijo lo que no hace ni dice nadie: “aquí tienen mi casa”.
“Eso sería una bendición. Ese es el gol último. Sería una oportunidad de oro. Muestra la mejor cara de nuestra comunidad en momentos tan difíciles”, añadió Bages.
También se abrió una cuenta en GoFundMe, que lamentablemente hasta el momento tiene solo recogidos 431 dólares.
Según se conoce, Bulit trabajaba en una empresa de plomería que terminó quebrando a causa de la crisis provocada por el COVID-19. Antes de que quebrara, fue despedido.
“Perdí mi apartamento hace tres semanas, y estoy viviendo en el carro con mi esposa… Estoy bien triste por cómo lo hicieron, botándome así, en la pandemia que estamos con el virus, no está bien”, contó el cubano hace tres días.
Increíblemente, y a pesar de que el gobernador del estado Ron DeSantis extendió una orden para evitar el desalojo de personas vulnerables como Bulit, el arrendador de este lo echó a la calle, junto con sus pertenencias luego de comunicarle que tenía “dos días” para conseguir el dinero de la renta, o de lo contrario largarse.
Bulit aclaró que no ha recibido siquiera el estímulo ni la ayuda por desempleo, a pesar de estar “legal” en los EE.UU.
“Sí, están regalando comida, pero yo lo que quiero es trabajar, no quiero cosas regaladas”, concluyó el joven, uno de los tantos afectados por la covid-19 que espera tener una segunda oportunidad.
Si quieres ayudarlo con $5, $10 o $20 dólares, o si necesitas un handyman que te haga algún trabajo en la casa o conoces de dónde están empleando plomeros, ¡dale una ayuda a este cubano!
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Si la comunidad norte americana hiciera lo mismo con los cientos de miles de ancianos y, enfermos que viven por años en las calles de Estados Unidos de América.
Fuera un ejemplo de humanidad.
hola, rodriguez
gracias por leer cubacomenta y compartir con nosotros sus criterios. saludos