Una broma de mal gusto relacionada con la muerte de George Floyd le costó el puesto a un gerente de un local de comida en Estados Unidos.
El “chistoso” gerente de un restaurante de Miami decidió cambiar el nombre del plato “Alitas de pollo ennegrecidas” a otro que pensó que era original: “No puedo respirar”, una de las frases muy escuchadas en las manifestaciones contra el racismo y la violencia policial.
Antes de morir a manos de un agente del orden en Estados Unidos semanas atrás, el afroestadounidense George Floyd repitió la frase “No puedo respirar”, que después se convirtió en lema de las protestas.
Al parecer Sam Diedrick pensó que sería divertido usarla para nombrar un platillo, pero como respuesta al pésimo intento de chiste que sonaba a una completa burla, la dirección de la empresa “Hole in the Wall Pub” decidió “suspenderlo inmediatamente”, explica el reporte de Efe.
“Es algo completamente censurable y en contra de nuestros valores. Hablaremos directamente con nuestros empleados para escuchar sus preocupaciones y explicarles los pasos que estamos realizando para que algo como esto no vuelva a ocurrir”, dijo la cadena, que cuenta con unos cuatro locales en el sur de La Florida.
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Incluso, un camarero del lugar, Brandon González, se mostró ofendido y renunció a su puesto cuando observó el cambio de nombre del polémico plato al momento de entregarle el recibo de su consumo a un cliente: diez alitas de pollo ennegrecidas.
“Hay una razón principal por la que me ofendí y me frustré y es el hecho de que en la cocina el 90 por ciento de los trabajadores son de raza negra. Realmente lo que estás haciendo es reírte del movimiento Black Lives Matter”, añadió la información de la agencia de noticias, compartida por medios locales.
Si bien la muerte de Floyd levantó la ira miles de personas en Estados Unidos y el resto del mundo, otros han reaccionado de forma opuesta ante las manifestaciones de racismo y violencia policial.
A principios del mes de junio, trascendió que unos jóvenes fueron a la cárcel por protagonizar el “George Floyd Challenge”, un ofensivo reto surgido entre adolescentes, en el cual se burlan del crimen cometido contra George Floyd.
La aparición de fotografías en las que jóvenes, de tez blanca, todos residentes en Inglaterra, repiten la escena que le dio la vuelta al mundo, donde Derek Chauvin, el ex oficial de Minneapolis, mantenía su rodilla sobre el cuello de George Floyd -mientras este decía “No puedo respirar”- enardeció a no pocas personas.
Algunos gestos que también pudieran ser considerados de mal gusto se han vivido con otros sucesos que coinciden, en el mismo tiempo, con la muerte de Floyd: la expansión del coronavirus.
En este caso, muchas tiendas de souvenirs de Miami pusieron a la venta prendas de ropa alusivas a la COVID-19, con frases como “Sobreviví al coronavirus”, junto a una máscara antigás con un símbolo de radioactividad.
Otra de las piezas en oferta portaba el mensaje “la crisis del papel higiénico en 2020”, en referencia al aumento de la demanda del producto, en Estados Unidos y el mundo, motivado también por el miedo hacia la evolución de la pandemia.
Julio Linares