Se despejan las variables del futuro encuentro entre Trump y Maduro. Trump quiere que Maduro salga del poder, y este último aspira a conversar “respetuosamente” .

Luego de que el presidente de los Estados Unidos le dijera en entrevista exclusiva al medio Axios que estaría dispuesto a conversar con el mandatario chavista Nicolás Maduro, desde Miraflores, Caracas, este último dijo estar listo para conversar “respetuosamente” con el mandatario norteño.

Mientras el líder chavista manifetó esto, e insistió en que hablaría con Trump “de la misma manera” que habló con Joe Biden en el 2015 cuando él era vicepresidente de Venezuela, desde Washington el inquilino de la Casa Blanca pareció recibir críticas por su presunto “espaldarazo” a Maduro en detrimento del opositor y elegido presidente por la Asamblea Nacional venezolana, Juan Guaidó, y aclaró que lo haría para exigirle su salida pacífica del poder.

“Mi respuesta es que, así como me reuní con Biden y conversamos largamente de manera respetuosa, cosa que quedó registrada en su momento, también en el momento que sea necesario estoy dispuesto a conversar respetuosamente con el presidente Donald Trump”, expresó Maduro a la estatal Agencia Venezolana de Noticias (AVN).

Al parecer, el encuentro estaría en un punto muerto, porque Maduro no va a negociar de ninguna manera su salida pacífica del poder -y al parecer tampoco por mandato de la Asamblea Nacional ni por el voto en las urnas- y Trump parece que no quiere conversar de otra cosa, o en otros términos, aunque se ha reunido con su principal rival económico, el mandatario chino Xi Jinping, con el cual ha tenido no pocos encontronazos; y también con su principal rival militar del momento: el norcoreano Kim Jong Un.

“Al contrario que la izquierda radical, yo SIEMPRE estaré en contra del socialismo y con el pueblo de Venezuela. ¡Mi Gobierno siempre ha estado del lado de la LIBERTAD y contra el régimen opresor de Maduro! ¡Solo me reuniría con Maduro para abordar un tema: una salida pacífica del poder!”, escribió Trump en Twitter, y no pocos seguidores respiraron aliviados con la noticia.

https://twitter.com/realDonaldTrump/status/1275072468709859328

“Quizá sí pensaría en ello. A Maduro le gustaría reunirse (conmigo). Y yo nunca me opongo a reunirme, muy pocas veces me opongo”, fueron las palabras exactas del presidente de EEUU durante la entrevista realizada el pasado viernes.

Según la AVN, la reunión entre Maduro y Biden se produjo en la ceremonia de investidura de la entonces presidenta de Brasil Dilma Rousseff. De la fecha, al momento actual, ha “llovido mucho”.

Para empezar, ya no está al frente de EE.UU. Barack Obama con su política de “entendimiento” que lo llevó hasta visitar Cuba, un país que no era visitado por un mandatario norteamericano en más de medio siglo. De hecho, no hay un gobernante demócrata al frente de los destinos políticos de EE.UU.

Por si fuera poco, la correlación de fuerzas en el mapa geopolítico latinoamericano ha dado un vuelco terrible. Dilma no está en el poder en Brasil. Tampoco lo está Correa, en Ecuador; ni Evo Morales en Bolivia, por lo que a Trump se le hará muy difícil conversar en buenos términos con el único mandatario de la región latinoamericana que se le ha enfrentado abiertamente.

No obstante, el “futuro encuentro”, si es que se da, es tendencia en las redes, aunque la realidad es que ni Trump espera mucho de Maduro, ni Maduro puede esperar mucho de Trump.

por Roberto A.

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