A propósito del estreno del documental Long Gone Summer, Sammy Sosa reaparece en una entrevista que acapara titulares

El extoletero dominicano Sammy Sosa, quien se retiró de los terrenos de juego hace ya once años, volvió a ser noticia este fin de semana al dar respuestas insólitas en una entrevista para la cadena deportiva ESPN.

El moderador del programa tocó el tema de las sustancias anabolizantes y aprovechó para preguntarle al invitado si había consumido estas en algún momento de su carrera. “Nunca he dado positivo en los Estados Unidos”, fue la respuesta del otrora estelar jonronero de los Cachorros de Chicago.


Incisivo, el periodista volvió a la carga y le dijo que eso no fue lo que le preguntó. “Sí”, afirmó a secas.
Continuando con el tema, el periodista arrinconó a la estrella y le recordó que en 2009 el influyente periódico The New York Times había asegurado que él estaba en un listado de 104 peloteros que habían dado positivo a un fármaco para mejorar el rendimiento en el año 2003. Sosa ripostó que en esa lista salieron a relucir muchas personas.

Una vez más el moderador trató de obtener algo coherente y después de aclararle que una cosa es consumir estas sustancias y otra es dar positivo en una prueba, le volvió a preguntar si alguna vez había consumido este tipo de sustancias prohibidas. “Nunca he dado positivo a una prueba en Estados Unidos”, reiteró el dominicano para sorpresa de todos los televidentes.

A Sosa nunca le han podido probar el consumo de esteroides o drogas para elevar su capacidad física. En aquella oportunidad el referido diario aseguró que las citadas pruebas se hicieron como parte de un acuerdo con el sindicato de jugadores para determinar si sería necesario imponer exámenes aleatorios de carácter obligatorio en todas las Grandes Ligas.

El agente del pelotero declaró después a un medio que no tenía comentarios al respecto, al igual que el portavoz de la oficina del comisionado.

En su declaración al comité de reforma gubernamental de la Cámara de Representantes el 17 de marzo de 2005 (4 años antes), Sosa había alegado:

“Para ser bien claro, nunca he tomado fármacos para mejorar el rendimiento. Nunca me he inyectado ni hice que alguien me inyectara algo. No he violado las leyes de Estados Unidos ni las leyes de la República Dominicana. He sido examinado incluso en fecha tan reciente como el 2004, y estoy limpio”.

Lo cierto es que la historia de Sammy Sosa tiene muchos puntos oscuros desde aquel momento en 2003 cuando fue sorprendido usando un bate relleno con corcho para aumentar el bote de la pelota.

A pesar de haber conectado en su carrera 609 vuelacercas y 2 mil 408 imparables, y haber remolcado mil 668 carreras, estos escándalos lo han privado -quizás para siempre- de su ingreso en el Salón de la Fama de Cooperstown. Para ello tendrá que obtener muchos puntos en la próxima votación, penúltimo intento para poder ser elegible.

Roque Díaz


 

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