Cientos de personas se reunieron para despedirse este martes en Houston, Texas, de George Floyd, el afroamericano que murió a manos de la policía de Minnesota y cuya muerte, sin dudas, no solo ha estremecido los sentimientos de una nación, sino que ha puesto en la mira de todos el tema del racismo estructural en EE.UU. Por si fuera poco, como si fuera un mandato divino, su muerte a manos de la policía ha puesto en tensión todos los departamentos de policía de Estados Unidos.
Más que eso. La muerte de George Floyd será transformadora, y ha creado un nuevo llamado a la reforma policial; reformar que ya han tomado forma en algunas partes del país, y que pudiera pronto convertirse en ley, si es que un Proyecto que está a punto de ser votado en la Cámara de Representantes y que cuenta con el apoyo de no pocos congresistas y senadores del partido Republicano pasa adelante y llega a la mesa del presidente.
A estas alturas, no pocos creen que la muerte de George Floyd ha sido inspiradora, y firmemente creen que su llegada al mundo tenía un propósito celestial.
Su muerte, quizás de otra manera, no hubiese reformado un solo acápite dentro del procedimiento de la policía de la más pequeña ciudad de Estados Unidos; pero estar 9 minutos debajo de tres policías, con uno de ellos presionándole el cuello con su rodilla mientras gritaba “NO PUEDO RESPIRAR”, sí que va a cambiar algunas cosas en este país, ya cansado de tanto abuso y divisionismo; de odios y rencores, y hasta de segregación.
La familia se despidió de Floy en el funeral, mientras piden justicia.
Hasta alli fue el candidato demócrata a la presidencia Joe Biden y dijo que la muerte de Floyd será un punto de partida para algo definitivo.
“No podemos dejar este momento pensando que una vez más podemos alejarnos del racismo”, expresó.
Mientras, en Nueva York, la legislatura estatal derogó una ley que mantiene en secreto los registros disciplinarios de los oficiales; y en Washington, D.C., la ciudad aprobó por unanimidad un proyecto de ley que incluye un acceso más rápido a las imágenes de la cámara corporal.
Allí mismo ha sido acusado con cargos de asalto un policía que empujó violentamente a una manifestante en las protestas. Sí, el oficial Vincent D’Andraia, de 28 años, es el primer oficial de policía de la ciudad de Nueva York que enfrenta cargos por conducta contra manifestantes que protestan contra la brutalidad policial.
En New Jersey han sido liberados los audios y videos del arresto de Maurice Gordon, de 28 años, un afroamericano que fue baleado seis veces por un oficial blanco después de una parada de tráfico rutinaria en Garden State Parkway, dos días antes de la muerte de George Floyd.
También han sido difundidos los videos del arresto de Derrick Elliot Scott, un afroamericano que murió bajo custodia policial en 2019, y en cuyo arresto se le escucha decir “I can´t breathe”, repetidamente.
En Texas, se han liberado los audios y el video del arresto de Javier Ambler, otro hombre que murió a manos de la policía mientras era arrestado, y quien también dijo varias veces “No puedo respirar” durante el arresto fatal ocurrido en 2019.
En Chicago, por su parte, ha sido expulsado de la fuerza policial el agente que mostró el dedo del medio -clara expresión vulgar- a unos manifestantes.
Más cerca del lugar donde Floyd será sepultado, Houston, el alcalde Sylvester Turner anunció una orden ejecutiva que prohibía los estrangulamientos.
El cuerpo de Floyd fue llevado en un carruaje tirado por caballos al cementerio, donde fue enterrado junto a su madre, pero su partida de este mundo deja una huella de transformación.
por Roberto A.
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