Esta es la segunda entrega de una serie de artículos sobre las brigadas médicas de Cuba en varios puntos del planeta y los ingresos que significan para el gobierno
Datos oficiales aseguran que tan solo en 2017 el gobierno cubano recogió unos 9 mil 628 millones de dólares por la labor de las brigadas médicas enviadas a diferentes puntos del planeta. Pese a los cuestionamientos, Cuba sigue defendiendo su apuesta por esta colaboración de la que obtienen jugosos ingresos las autoridades.
Estos ingresos para las arcas de una muy depauperada economía comenzaron a mermar a finales del 2018, tras el fin de la cooperación en el terreno de la salud entre Cuba y naciones como Bolivia, Ecuador y Brasil.
Precisamente un trabajo publicado -en noviembre del 2018- en el portal digital Diario de Cuba sobre las brigadas médicas en Brasil, que recibió el Premio Latinoamericano de Periodismo de Investigación Javier Valdéz 2019, sacó a la luz los cables de la embajada brasileña en La Habana durante las negociaciones para la creación del programa Más Médicos. Constituían información reservada, que se ocultó por cinco años, y a la que los colegas Pablo Díaz Espí, Mirta Fernández Laffitte, y Marcelo Soares pudieron acceder.
El artículo “Las mentiras de La Habana: Cómo ocultó Cuba los salarios de los médicos cubanos en Brasil y cómo se implicó a la OPS” desmenuza todas las triquiñuelas de los gobiernos de Brasil y Cuba al respecto.
Sobresale en la investigación de Diario de Cuba lo que se describe a continuación: “El rol de La Habana significó la participación cubana en un fraude orquestado por el Gobierno de Dilma Rousseff; también, su intervención en el diseño de un esquema que ahora pretende que le sirva de coartada, cuando declara que los médicos cubanos eran en realidad becarios, y que lo que se les pagaba -suma de la que la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos retenía más del 70%- no eran salarios”.
Habla un médico que cumplió misión en China
Para esta segunda entrega de la serie que Cubacomenta ha preparado sobre las brigadas médicas cubanas en el exterior, entrevistamos a un doctor que se graduó en 1995 como médico general, y posteriormente en 2002 de Medicina Interna. Reside hace más de 6 años en Miami, pero del 2006 al 2009 fue integrante de una brigada de colaboradores médicos en China.
Sobre los inicios de estas brigadas médicas de las que hoy tanto se habla en tiempos de coronavirus, el médico recuerda: “te puedo asegurar que cuando comenzó la colaboración médica cubana, sobre todo con la furia de Venezuela, todos salían esperando una mejoría económica personal… y luego por solidaridad. Fíjate si fue así que cuando comenzaron a aparecer misiones mejor remuneradas, los médicos evadían ir para Venezuela; no solo por el salario sino por el riesgo al que estaban sometidos en esas misiones, en las que la seguridad del colaborador no era apropiada y ya habían otras opciones mejor pagadas. Incluso me atrevo a decirte que aquellos que se brindaron a misiones verdaderamente riesgosas, como combatir al ébola, también lo hacían por el beneficio económico, que aunque era una burla algo le resolvería a la familia”.
“Esto no quiere decir que humanamente no sean excelentes profesionales que además están dispuestos a prestar sus servicios en cualquier parte del mundo, realmente son excelentes; pero son personas, son seres humanos que quieren alimentarse bien ellos y a su familia, vestir, disfrutar de unas buenas vacaciones, trabajar en buenas condiciones, poder sentirse satisfechos con sus salarios y con pocas preocupaciones para entonces dedicarle más tiempo a su profesión, algo que hoy es difícil en Cuba. Aquellos que no han cumplido misión, de milagro pueden tener el privilegio de contar con una computadora”, agrega en diálogo con Cubacomenta.
Aquellos años 80
“En los años 80, un médico en Cuba ganaba 400 pesos. Eran los profesionales de mejores salarios, con carros, buenas casas, vacaciones en Varadero. Si en esos años alguno salió de misión, te puedo asegurar que la mayoría lo hacía por solidaridad, aunque también tenían que dar el paso al frente o comenzarían a ser señalados, lo cual los colocaba en una situación complicada”, prosigue el testimonio del médico cubano que estuvo en China de 2006 a 2009.
Y añade: “Allá hoy en día, cualquiera estudia Medicina, lo cual no ocurrió en nuestra generación; pero además un gran porciento de los que optan por esta profesión lo hace pensando primero en el beneficio económico que van a tener al graduarse, en caso que puedan salir de misión y en el mejor de los casos desertar”.
El doctor cubano que lleva seis años en Miami, trabajando mientras se saca el board, nos explica cómo transcurrió su tiempo ejerciendo en Cuba: “En lo personal te puedo decir que no tenía cara para pedirle favores a los pacientes a cambio de mis servicios y que atendía igual al que me traía una merienda que a aquellos que vivían igual o peor que yo. Pero muchos o gran parte de los médicos cubanos hoy en día tienen a sus paciente favoritos, aquellos que les resuelven muchos de los problemas que hoy se viven en la isla. ¿Los vamos a criticar? Noooo, es el sistema el causante de ese deterioro desde el punto de vista humano y profesional que es además de lo peor que hoy se vive en la salud pública cubana. Un buen regalito y serás atendido con prontitud”.
La historia que nos relata este galeno con 25 años de experiencia concluye: “Solo los que vivimos la experiencia de luchar una misión médica en Cuba podemos con seguridad abordar el tema, los demás no tienen ni idea de lo que hablan y si la tienen… nunca dirán la verdad”.
Ania Liste
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