¿Qué hará ahora con los 378 rollos de papel higiénico?
Una mujer australiana intentó usar las redes sociales para vender 378 rollos de papel higiénico que había acaparado. Fue tanto el rechazo que causó que posteriormente debió eliminar su post.
“Viendo el exceso de papel higiénico que ya no necesito, vendo a 20 dólares el paquete de 18 unidades. Estoy cerca de las tiendas de Moryfield. No me ataquéis por haberme asegurado de que mi familia estuviese preparada para la pandemia”, escribía la madre.
Morayfield es una ciudad de la región de la Bahía de Moreton, en Queensland (Australia). En ese país, como en otros del planeta, los rollos de papel sanitario fueron uno de los productos que escasearon, y mucho, durante los primeros días de cuarentena.
La gente iba en tumulto a los centros comerciales. Al igual que esta australiana, muchas otras personas llenaron los carros con grandes cantidades, y dejaron a otros sin la menor oportunidad de abastecerse.
Cuando la madre australiana publicó en Facebook su intención de vender el papel sanitario, los internautas le cayeron en pandilla. “Oportunista. ¿Qué pasa? ¿Ya no necesitas más papel higiénico? Te hiciste con lo que pudiste, ahora asume las consecuencias”, le soltaba uno.
Y otro: “No, no voy a criticarte por acumular tanto papel higiénico e inflar los precios. Tienes 21 packs de 18 unidades. Esto es mucho más papel del que va a necesitar una familia como la tuya durante esta crisis. Asume las consecuencias”.
A mediados de marzo Cubacomenta publicaba un artículo sobre esta obsesión de comprar. De acuerdo con especialistas en psicología del consumidor, “el comportamiento es obviamente irracional, y un claro ejemplo de una mentalidad de rebaño impulsada por las redes sociales y la cobertura de noticias”.