Una pareja de ancianos en Italia celebró sus bodas de oro en la unidad de cuidados intensivos rodeados del cariño de sus médicos y enfermeras. Los ancianos se encuentran recluidos en el centro hospitalario ya que ambos son pacientes del COVID-19.

Y sí, aunque el coronavirus les estropeó todos sus planes seguramente y la pareja a esta hora se hubiese imaginado en un crucero por el Mediterráneo o algo parecido, no menos importante es el hecho de que a pesar del mal momento que están pasando, el personal sanitario organizara una celebración especial para ellos.

La conmovedora celebración tuvo lugar en el municipio Fermo, en la región oriental italiana de Las Marcas. Allí, en el Hospital Murri se encuentran Sandra (71 años) y su esposo Giancarlo (73).

Fue Roberta Ferretti, una enfermera de reanimación en el hospital quien descubrió que la pareja celebraba sus bodas de oro. Roberta no quiso que la ocasión pasara de largo y se dio a la tarea de organizar algo para los ancianos. Fue así como apareció un pastel pequeño, un número 5 y un 0.

El “regalo” no quedó ahí, pues Roberta y los demás trabajadores que se unieron en el festejo, juntaron las camas de los ancianos, así que estos aunque no pudieron darse un beso sí pudieron juntarse de las manos, mientras Roberta y los demás tarareaban la marcha nupcial.

Según el medio Newflash, la fiesta apenas duró 10 minutos, pero en ellas no faltó el amor.

Hubo hasta fotos, y en una de ellas se puede ver al personal rodeando a la pareja y formando con sus manos corazones.

“Fue un momento increíble, muy hermoso, esos minutos solo nos pagan por todo el sacrificio que hemos hecho en estos días. Él seguía repitiendo cuánto la amaba, rompimos a llorar. En el aire, puedes sentir el amor que persigues toda tu vida”, declaró a un medio local la enfermera Roberta.

Según dijo Roberta Ferreti, Sandra lloraba mucho pues dijo estar muy preocupada por su esposo. La mujer le contó a la enfermera que después de tantos años, ella amaba a Giancarlo como si fuera el primer día.

“No tengo méritos salvo el de empujar a mis colaboradores a ver siempre a la persona al lado del paciente y a usar la identidad y la biografía como apoyo a la cura. A veces surge el milagro, como en este caso”, dijo la jefa de la UCI, Luisanna Cola, quien compartió la emoción de Roberta y de todo el equipo.

“Nos han hecho un regalo fantástico. Nuestros padres nacieron para estar juntos, una pareja a la antigua usanza, de esas que ya casi no existen”, dijeron los hijos de la pareja cuando recibieron las fotos de la celebración. Todos agradecieron con emoción el gesto del personal sanitario.

Según revelaron además, los ancianos están fuera de peligro así que pronto podrán volver a casa juntos.

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