Se trata de Charlie, un dragón de Komodo hembra que vive en el zoológico de Chattanooga en Tennessee, y que ha quedado embarazada por el fenómeno de “partogénesis”.
Charlie, un dragón de Komodo hembra que vive en el zoológico de Chattanooga en Tennessee, ha quedado embarazada y dio a luz en un claro ejemplo de que “El Señor puede obrar de modos misteriosos”.
Charlie dio a luz y nadie sabe quién es el padre de las tres criaturas. Una pareja que le pusieron, de nombre Kamal, al parecer no pudo hacer bien su tarea y Charlie terminó embarazada y dando a luz a Onyx, Jasper y Flint, por obra y gracia del espíritu santo.
Claro que, en auxilio de los incrédulos ha salido “la ciencia”, y ha explicado que Charlie decidió convertirse en “madre independiente” tras el fracaso de su relación con Kamal y lo hizo mediante un fenómeno llamado partenogénesis.
La partenogénesis ocurre muy raramente entre los vertebrados. Solo 70 especies en el mundo son capaces de salir embarazadas sin una presencia masculina. Es tan raro como que ocurre en un 0,1% de todos los vertebrados del planeta. Ocurre cuando un óvulo fértil, fertiliza otro óvulo.
El proceso biológico de hacer un óvulo, llamado ovogénesis, generalmente produce un cuerpo polar, que contiene una copia duplicada del ADN del huevo.
“Normalmente, este cuerpo polar se encoge y desaparece. Sin embargo, en el caso de los Komodos, los cuerpos polares evidentemente actuaron como esperma y convirtieron los óvulos en embriones ”, dijo Scientific American en 2006 cuando se informaron los primeros casos de partenogénesis en dragones de Komodo.
Para confirmar que Kamal no era el padre, los científicos que atendieron el parto hicieron una prueba de ADN y confirmaron que Kamal falló en sus funciones reproductivas.
De acuerdo con los expertos esto sucede en esta especie porque están habituados a vivir en un lugar inhóspito, apartados de todos los demás seres vivos que le rodean.
Este vertebrado debe su nombre a que es originario de una isla en el Océano Índico.
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