Lo cierto es que el mundo desarrollado – y pienso, por ejemplo, en China y Japón – sustenta su transporte de mercancías y de pasajeros en esta vía.
El 2019 parece haber sido un año clave en el resurgimiento del transporte por ferrocarril en la isla; pero, ¿se puede llamar año de despegue?
El diario oficialista Granma abordó el asunto y reconoció que falta mucho, pero mucho aún para que este, “en próximos años, se convierta en el impulso que necesita la economía en el país”.
Resulta paradójico si se quiere; Cuba fue uno de los primeros países en el mundo en estrenar el servicio de ferrocarril, y sin embargo en los últimos años ver un tren por los campos cubanos era casi una rareza.
Granma informa que los nuevos coches, traidos desde China y Rusia fueron responsables de los 411 viajes y 400 800 pasajeros transportados, pero no solo fue un medio vital para la transportación de pasajeros sino su índice de consumo de combustible es inferior al del transporte automotor.
Clave parece ser el transporte de mercancías. El medio oficialista habla de 41,9 miles de toneladas transportadas por esa vía, entre ellas “cervezas, agua embotellada y refrescos; tuberías plásticas para acometidas hidráulicas de diferentes diámetros; contenedores refrigerados desde el Mariel hasta las provincias orientales; así como la transportación de cereal desde el puerto de Cienfuegos hasta Camagüey.”
En cuanto al servicio de transportación de pasajeros, dice Granma, “se ofrece en varias provincias, donde se vinculan 421 asentamientos rurales: Matanzas, Villa Clara, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila, Las Tunas, Granma, Holguín, Santiago de Cuba y Guantánamo; constituidos en aproximadamente 158 rutas», explicó Fátima Palacios Garrido, vicedirectora de la UFC.”
Lo cierto es que el mundo desarrollado – y pienso, por ejemplo, en China y Japón – sustenta su transporte de mercancías y de pasajeros en esta vía. Cuba, por diversos motivos apostó desde siempre al obsoleto sistema de transporte por carreteras para ahora darse cuenta de lo equivocado que estaban. Quizás están a tiempo de lograrlo, y en la apuesta, entran dos claves con nombres de países: China y Rusia.