Dicen que “el que no sabe, es como el que no ve”, pero al parecer el chofer de un ómnibus que circulaba este martes por La Habana, no sabía y tampoco vio, que la salida hacia el oeste de La Habana del túnel de la bahía tiene sus particularidades. ¿Qué sucedió? Pues lo que han visto en la foto de portada. El ómnibus quedó atascado en la salida del túnel.
Afortunadamente no se reportaron ni muertos ni heridos, en un hecho que al parecer se repite a menudo.
Canal Habana, portal informativo que divulgó la foto a través de su página de Facebook dijo que el suceso tuvo lugar en horas de la noche. ¿Será que en medio de la oscuridad el chofer del vehículo no vio cuál es la altura máxima permitida en esa salida del túnel de la bahía? ¿Por qué si ha sucedido igual en otros momentos tenemos que confiar en una sola señal y no ubicar más señales, dentro del túnel advirtiendo de esta particularidad en la salida del túnel hacia el oeste? ¿Por qué en tantos años, esa salida no se ha modificado? ¿Habrá que esperar que uno, dos, tres o más personas fallezcan en un accidente de tránsito ahí mismo para tomar alguna medida?
Son preguntas que a este redactor vienen a la mente cuando mira la imagen de la guagua atascada en el túnel de la bahía.
Y es que a las limitaciones económicas actuales y de siempre, se han juntado no pocos seres que no hacen nada, sino les viene la orientación “de arriba”.
Alguna medida habrá que tomar, porque simplemente no puede continuar sucediendo algo así.
Ahora que Cuba ha reforzado sus relaciones bilaterales con China, este redactor está más que seguro que cualquier empresa china dedicada a la ingeniería en puentes, es capaz de resolver ese asunto en menos de tres meses.
O si no, situar no una, sino muchas señales dentro de todo el puente que adviertan que por ahí, no pueden pasar los ómnibus. Y punto.
Supongo que el chofer que no las vea tiene que estar muy ciego, o ser muy distraido.
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