Semanas después de un caso de rabia que consternara a Cuba, la isla informa de un nuevo evento por el cual mantienen a dos personas bajo vigilancia.
La Dirección Municipal de Salud Pública en Mayarí, en el oriente del país, labora en el control del nuevo suceso de rabia que ocurrió en el mismo municipio donde se dio un caso en mayo pasado, que provocó la muerte a algunos de los implicados.
Una familia de la barriada de Guayabo visitó el médico el pasado 10 de junio debido a las lesiones provocadas por un gato, al cual los análisis en laboratorios de Holguín dieron como positivo, explica Radio Mayarí.
Según el medio, “de inmediato fue aplicado el protocolo establecido para estos casos, el cual incluye la vacunación antirrábica inmediata y la observación constante de los humanos afectados”.
Yanet Tamayo Laurencio, directora de Higiene y Epidemiología del municipio, explicó que se toman medidas especiales en la zona del acontecimiento y que hasta el momento los pacientes presentaban una evolución positiva.
Otro caso “singular tuvo lugar en la comunidad de Guanina, donde un gato agredió a dos niñas y ocasionó lesiones, incluyendo a la abuela de estas que salió en su defensa”, añade el reporte.
Los investigadores alertan que en Guayabo se conoce de la presencia de rabia en especies de la fauna silvestre como murciélagos y mangostas. Además, explican que en dicho territorio se inició la vacunación de animales domésticos como gatos y perros.
Un artículo de un investigador advertía en 2015 sobre el peligro que representa en este caso la mangosta -conocida en Cuba como hurón-, como vector en esa provincia cubana.
“Habitualmente, estos animales evaden al hombre, pero cuando presentan rabia los atacan. Se han capturado mangostas rabiosas en las calles y dentro de las casas con bastante frecuencia, y en ambas ocasiones han agredido y lesionado a personas”, explicaba en 2015 el Doctor en Medicina Veterinaria Luis Lotti Soler.
Mayarí ha recibido hasta hoy 10 mil dosis de vacunas antirrábicas, y se conformó allí un “grupo técnico para dirigir las acciones contra la rabia”, integrado por salud pública, veterinaria y el CITMA.
La situación preocupa a los habitantes de ese municipio, en donde en mayo un gato callejero infectado agredió a miembros de una familia, por lo cual murieron dos hermanos, Eldris y Fernando Sánchez Mustelier, y luego Eduardo Mejías Zayas.
El perro es la fuente principal de infección, con un 99 por ciento de los casos, aunque Cuba no reportaba rabia humana transmitida por perros desde el año 2008, según el Ministerio de Salud Pública cubano.
Esta institución explica que “el período de incubación de la rabia suele ser largo, de 2 a 3 meses, pero puede oscilar entre una semana y un año, dependiendo de factores como la localización de la lesión (más grave mientras más cercana a la cabeza esté) y la carga del virus”.
Julio Linares
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