Muchos aficionados del béisbol cubano pudieran interpretar como una traición, o como una burla, esta nueva iniciativa de las autoridades del deporte cubano que parece otra movida más para recaudar divisas para la asfixiada economía nacional.
Cuba comenzará a vender artículos deportivos online a través de la página www.lotengo.co desde el próximo lunes 29 de junio, pero una inmensa mayoría de los seguidores de la pelota dentro del país no tendrán acceso a estos.
Camisetas, guantes y otros surtidos podrán ser adquiridos en ese sitio web, pero con la peculiaridad de que las compras en este primer momento solo podrán realizarse desde el exterior y con tarjetas VISA y MASTERCARD.
Esta medida implica un golpe a las esperanzas de los fanáticos en el país, porque para la compra artículos deportivos online “una persona puede pagar con la moneda USD desde otro país y decide a quién se le entrega aquí en Cuba”, indica en reporte de Radio Rebelde.
La regulación implica que quedarán sin la posibilidad infinidad de personas que no tienen tarjetas VISA y MASTERCARD, y que tampoco tienen algún familiar en el extranjero que les pueda ayudar para adquirir una uniforme del equipo de sus amores para la venidera Serie Nacional, o hasta guantes para la práctica del llamado pasatiempo nacional.
“Uno de los reclamos de la población ha sido poder adquirir artículos deportivos alegóricos con las selecciones de su simpatía. Es por esto que la Industria Deportiva BATOS incrementa sus producciones con el fin de que las personas puedan acceder a los mismos”, se jacta la emisora oficialista, que obvia cuántos están automáticamente fuera de la ecuación, y que no pueden comprar estos artículos deportivos online.
La Empresa Comercializadora, Importadora-Exportadora de la Industria Ligera venderá por intermedio del mentado sitio web, pero la producción corresponde a Batos, la industria deportiva de la isla, cuyo directivo Andrés Alberdi afirma que están en condiciones de satisfacer las demandas, aunque la máquina de hacer las gorras está presentando dificultades y no podrán arrancar con ese surtido.
Quizás la demanda a que se refiere Alberdi es a la que proviene del extranjero, porque en esta movida fueron lanzados a un lado los muchos aficionados del béisbol cubano, ante la ausencia de una oferta interna a “precios módicos”, como llama Radio Rebelde, que debería ser en CUC o moneda nacional.
“Ese es uno de nuestros sueños. Lo que sucede que eso no lo decide la Industria. Si un día se autoriza venderemos en moneda nacional estos productos sobre todo para que los niños tengan sus trajes, guantes entre otros implementos”, justifica el directivo de Batos.
Mientras, los cubanos esperarán porque alguien desde el exterior les regale una camiseta que hasta puede ser personalizada con sus nombres; o un guante en casi 26 dólares para que su hijo sueñe con jugar a la pelota.
Omar Cortázar