Yordanis Alarcón, el jugador más valioso de la última Serie Nacional, no es del agrado de los dirigentes deportivos encargados de armar el equipo Cuba
No por injusta dejó de sorprender la noticia que Yordanis Alarcón, la tercera base de Las Tunas, fuera desechado de la preselección nacional que se prepara desde hace casi dos semanas en el estadio Latinoamericano para salir a buscar su boleto olímpico en el torneo de Arizona.
El jugador más valioso de la última Serie Nacional de béisbol en la isla no es del agrado de los dirigentes deportivos encargados de confeccionar el equipo Cuba; y eso ya lo habían dejado claro hace unos días atrás en el momento que fueron dados a conocer los nombres de los preseleccionados para el evento preolímpico.
Los aficionados, en buen cubano, “armaron la tremenda” cuando no vieron el nombre de Yordanis Alarcón en el listado de los 36 peloteros preseleccionados para Arizona. Producto de la presión popular se incluyó a última hora, al igual que al capitalino Yosvani Peñalver (jardinero más ofensivo del campeonato). En este torneo, la isla pondrá en juego su presencia en las olimpiadas de Tokio 2020.
El tunero Yordanis Alarcón a fuerza de batazos se ganó el puesto con una línea ofensiva de 378/415/562, 15 cuadrangulares y 53 carreras impulsadas. Sus números lo llevaron a ser considerado el jugador más valioso de la temporada, y siguió calentando el madero en los topes preparatorios, en un esfuerzo estéril por mantenerse dentro del equipo Cuba.
Solo once turnos al bate le dieron en esos juegos de confrontación contra la selección nacional sub 23 y el equipo de Matanzas, y conectó cuatro imparables con un vuelacercas incluido, acciones que hicieron pensar a muchos que no sería fácil su eliminación, al menos en la primera vuelta.
Sin embargo, al darse a conocer este miércoles los nombres de los primeros seis excluidos, el suyo estaba junto a los de Yunior Ibarra, Jefferson Delgado, Edilse Silva, Alberto Calderón y Ángel Sánchez, todos peloteros de bajo rendimiento durante estos topes preparatorios.
Una vez más la injusticia manda a la hora de armar una selección nacional y vuelven a flotar dudas sobre los elementos a tener en cuenta para que un pelotero pueda tener ese privilegio, máximo premio por el que luchan los atletas dentro su campeonato.
Ahora le tocó el turno al veterano de 37 años y 19 campañas. Yordanis Alarcón es un hombre que aunque maduró tarde, se ha cansado de dar “palos” estos últimos tres años para llevar a su equipo de los Leñadores tuneros al podio de premiaciones, pero está marcado quién sabe por qué razones por los dirigentes que mueven los hilos de la pelota cubana.
Como él, a través del tiempo, hay muchos otros que al final se han rendido o han decidido probar suerte en otras tierras. Sobran los casos de marginados que luego han triunfado en ligas foráneas bajo el asombro de esos señores que deciden en la Comisión Nacional de Béisbol.
Muchas son las razones por las que la pelota cubana ha caído en un vacío con continuas derrotas internacionales. En solo unos años, Cuba pasó del lugar uno al ocho del ranking mundial; pero sin dudas la mala selección de los atletas del team Cuba, basado en intereses personales y hasta políticos, ha contribuido a este desastre.
Roque Díaz
