“Al personal del Hospital Nicklaus solo le podemos decir: gracias. Han puesto y ponen sin escatimar lo último de la medicina más avanzada, así como todo su amor y profesionalismo para salvar a Thiago”, apuntó la portavoz de la familia, Janett Jalil.
De acuerdo con información dada a conocer por Janett Jalil, portavoz de la familia del menor cubano conocido como “Thiago”, quien fue traido a los EE.UU. para operarse de un delicado tumor en la cabeza, este presenta muestra respuestas de recuperación neurológica, apenas dos días después de haberse sometido a dos operaciones con 72 horas entre ambas.
Durante una primera operación, realizada en el Hospital Nicklaus de la ciudad de Miami, al menor le fue extirpado el 60 por ciento de la tumoración. Luego, una segunda intervención se centró en recoger posibles remanentes del tumor.
Según relató Jalil en Facebook, el menor ingirió por sí mismo dos onzas de compota de manzana, lo cual según los médicos es una buena señal de recuperación neurológica.
Sin embargo, Jalil dijo que el niño está tosiendo debido a las entubaciones “tan seguidas” a las que fue sometido y que “no para de quejarse”.
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La portavoz dijo además que aunque el menor siente dolores lógicos de las dos operaciones “no se le puede sedar más”.
“La doctora Heather McCray lo visitó y evaluó por más de una hora. El niño fue puesto en los brazos de su mamá Milena para restablecer los lazos afectivos de ambos. La gravedad está latente”, añadió.
Una delicada intervención quirúrgica
No todo está ganado. A la operación, compleja en sí misma, le seguirá una etapa también larga y que requiere cuidados.
Thiago fue llevado a la sala de cuidados intensivos con una enfermera asignada solo para él “dada su gravedad”.
“Hay que esperar la evolución en los próximos días”, afirmó la portavoz familiar al hablar sobre la salud de Thiago. Janett Jalil explicó que el pequeño Thiago sufre además “otras afecciones neurológicas”.
“Al personal del Hospital Nicklaus solo le podemos decir: gracias. Han puesto y ponen sin escatimar lo último de la medicina más avanzada, así como todo su amor y profesionalismo para salvar a Thiago”, apuntó.
Thiago llegó con su madre el pasado 28 de enero a Estados Unidos con una visa humanitaria para operarse en el Nicklaus Children Hospital. El niño padece un tumor cerebral.
En Cuba se lo dictaminaron pero le comunicaron a su madre que por lo delicado de la operación, por el lugar donde se encontraba alojado el tumor y por la ausencia de instrumentos adecuados para su operación no se podía hacer nada en la isla.
Sin embargo, y aunque las esperanzas se las redujeron casi a cero, la madre de Thiago no se dio por vencida, y junto a familiares y amigos puso sus esfuerzos en lograr una VISA HUMANITARIA y finalmente logró traer al menor a los Estados Unidos.
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